En lo que se refiere al voto electrónico, no todo van a ser ventajas. Antes de enumerar algunas desventajas concretas se pueden tener en cuenta también las experiencias negativas que han tenido en algunos países. Aunque también existen experiencias positivas, las experiencias negativas que han existido demuestran que las cosas pueden salir mal, y si las cosas pueden salir mal, no es todavía un sistema fiable. También es relevante el hecho de que existiendo actualmente todos los requisitos técnicos necesarios para poder implementarlo es el sistema tradicional el que se mantiene en todos los países democráticos.
Un problema adicional es el de vencer la resistencia al cambio por parte de los ciudadanos y de las administraciones. Hasta que no pase alguna generación mas, no todas las personas están preparadas para asumir un cambio en este sentido. Sobre todo las personas de mayor edad podrían quedar discriminadas.
En un sistema tracidional el ciudadano tiene claro que ha depositado en la urna la opción elegida, y que además el recuento va a ser auditado por otros ciudadanos. Sin embargo, en el sistema de votación electrónica hay que confiar en que el sistema de recuento este bien implementado y confiar en un núcleo de técnicos que lo auditen.
Otra cuestión importante es como garantizar que el voto es secreto. Cuando tu sueltas una papeleta en una urna ya no hay manera de identificar al individuo con dicha papelera. Pero cuando realizas el voto a través de un sistema electrónico, como por ejemplo a través de internet con DNIe, hay que garantizar de alguna manera que no quede ningún rastro que pueda relacionar la identificación digital del DNIe, con la opción elegida para votar.
Los sistemas informáticos y electrónicos están expuestos a fallos eléctricos, de comunicaciones etc..., lo cual no sucede con el papel. Cualquier contratiempo en este sentido puede generar graves problemas, por ejemplo, en unas elecciones generales.
Otros problemas son los relacionados con ataques externos al sistema, tipo virus informáticos, hackers etc...
Son muchos los problemas que hay que superar para llegar a una plena implantación de este sistema, aunque en mi opinión mas pronto que tarde llegara.
Un problema adicional es el de vencer la resistencia al cambio por parte de los ciudadanos y de las administraciones. Hasta que no pase alguna generación mas, no todas las personas están preparadas para asumir un cambio en este sentido. Sobre todo las personas de mayor edad podrían quedar discriminadas.
En un sistema tracidional el ciudadano tiene claro que ha depositado en la urna la opción elegida, y que además el recuento va a ser auditado por otros ciudadanos. Sin embargo, en el sistema de votación electrónica hay que confiar en que el sistema de recuento este bien implementado y confiar en un núcleo de técnicos que lo auditen.
Otra cuestión importante es como garantizar que el voto es secreto. Cuando tu sueltas una papeleta en una urna ya no hay manera de identificar al individuo con dicha papelera. Pero cuando realizas el voto a través de un sistema electrónico, como por ejemplo a través de internet con DNIe, hay que garantizar de alguna manera que no quede ningún rastro que pueda relacionar la identificación digital del DNIe, con la opción elegida para votar.
Los sistemas informáticos y electrónicos están expuestos a fallos eléctricos, de comunicaciones etc..., lo cual no sucede con el papel. Cualquier contratiempo en este sentido puede generar graves problemas, por ejemplo, en unas elecciones generales.
Otros problemas son los relacionados con ataques externos al sistema, tipo virus informáticos, hackers etc...
Son muchos los problemas que hay que superar para llegar a una plena implantación de este sistema, aunque en mi opinión mas pronto que tarde llegara.
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